Publicado por

Informe, formador de personas

Resumen de la entrevista

 

¿Qué función desempeñas dentro del sistema del mundo artístico?

Bien, pues yo soy profesor de Dibujo. Trabajo principalmente con Secundaria, por lo tanto, soy el primer eslabón que tienen de contacto con especialistas en el mundo artístico. Abarco desde los 12 a los 18 años normalmente.

¿De qué depende que puedas desempeñar este papel?  (¿qué otros elementos de este sistema hacen posible tu actuación?)

En primer lugar, depende mucho del currículo que el Ministerio plantea, siendo esto a demanda de las expectativas sociales ante el arte. Al ser estas expectativas muy bajas, no existe un apoyo real a estas disciplinas y se encuentran aparcadas, aparte del resto de disciplinas de educación.

Depende mucho también de la voluntad de cada profesor en cómo aproximar este mundo a los alumnos.

Es muy importante también tener en cuenta que los jóvenes están constantemente expuestos a imágenes de todo tipo y yo creo que mi papel es darles una herramienta para que puedan entenderla y ordenarla cada uno siguiendo su propio criterio.

¿Crees que tu intervención en la educación puede condicionar el curso de la vida de algunas personas? Si es así ¿de qué manera?

En mi experiencia personal existe gente y existen momentos en los que veo claramente por qué me dirigí hacia el arte y por qué me dediqué a esto, entonces, de la misma manera me imagino que la educación o los profesores pueden ser uno de los elementos que cambian o que descubren algo en las personas, que les haga decidirse por este camino. Pero hay que ser muy modesto en esto, hay que tener en cuenta que la educación artística es mínima, se reduce a dos años, dos horas a la semana en la Educación Secundaria Obligatoria, por lo que se hace algo complicado.

¿Para llevar a cabo tu papel tienes que relacionarte con otros elementos o actores del mundo del arte? ¿Cuáles son estos elementos? ¿Qué relación mantienes con ellos?

A ver, en el aspecto puramente laboral, no. Fundamentalmente lo que tengo que hacer es estar muy atento a lo que se está haciendo, acercarme lo máximo posible al universo figurativo de los chavales. Estoy pendiente de los videos de música que ven, las películas que les sean especialmente llamativas o la estética de tribus urbanas que puedan servirme de referentes y muchas cosas más. Si no haces esto no puedes realmente hablar con ellos y comprenderlos.

Pero en este punto de la educación no llegas a los chavales explicándoles el mercado del arte, no lo necesitan aquí.

En tu opinión ¿Un artista nace o se hace?

Vamos a decir las cosas claras, el artista definitivamente se hace. Yo estoy dando clase, soy profesor y por lo tanto tengo muy claro que se aprende. También entiendo que, como en cualquier otra actividad humana que requiera un proceso largo de aprendizaje, hay que tener vocación para aguantar el tirón.

Yo sí puedo decirte que a mí, siendo pequeño, me pusieron un lápiz en la mano y aprendí a jugar dibujando, y de la misma manera sé que lo mismo le ha pasado a muchas personas. Y alguien nos enseñó que eso era divertido, pero necesitas esa vocación para dedicarle todo el esfuerzo que traerá más adelante. Pero, al final de todo, es un oficio, y los oficios se aprenden.

 

¿Influye tu opinión sobre la última pregunta en cómo afrontas tu trabajo?

Hay una palabra que es “entusiasmo”. Los chavales necesitan ver en ti el entusiasmo, ver que es algo que realmente te incumbe, necesitan verte las manos manchadas de tinta y es eso lo que realmente abre las puertas a todo. Puedes tener más capacidad de expresión o menos, pero lo que realmente hace que eso se pegue al alma de la gente es el entusiasmo.

¿Dónde crees que reside la artisticidad de las cosas? ¿En qué momento algo pasa a ser considerado artístico?

Esto es muy complicado. Si damos por bueno que esto nace de necesidades del ser humano, aquello que responde a esas necesidades es arte. La mejor definición de arte que yo manejo es la de la gente común cuando dice “jope fulanito, qué arte tienes con la huerta o qué arte tienes con la madera”. Lo que hay detrás de eso es el hecho de elevar una actividad humana a una categoría de perfección. No todas las actividades humanas tienen esta capacidad, pero las que realmente salen del alma y pueden ser refinadas a un cierto nivel, podrán ser consideradas arte gracias al anhelo, la necesidad de la persona de trabajar en esa actividad.

¿Hasta qué punto crees que es necesaria una educación artística y de técnicas artísticas, tanto para personas que pretenden dedicarse al arte como para personas que no?

Es algo fundamental. La participación de la gente en el arte es imprescindible, creo que es la tendencia natural del ser humano, por lo tanto, todas las personas deben tener conocimiento de todas las técnicas posibles para abordar estos temas.

De hecho, creo que ahora mismo el analfabetismo visual es un peligro enorme al que está expuesta gran parte de la gente. Es importantísima una educación visual ya que ahora mismo todos estamos expuestos constantemente a imágenes en muchos formatos diferentes, ya hablando aparte del arte, esto forma parte de nuestras vidas cotidianas y es lo que lo hace tan imprescindible.

¿Crees que es importante que un educador tenga su propia obra y carrera artística?

Esto es indispensable, lo hablábamos antes, no se puede jugar de farol, se deben tener las manos manchadas de tinta. Es más, hablando con compañeros, he llegado a la conclusión de que la crítica artística se puede desarrollar de manera que una obra conteste a otra obra, estableciendo una conversación dentro de un mismo lenguaje, que es la expresión artística. La única herramienta de comunicación que vale para el arte es el arte, de manera que un educador ha de estar inmerso en ello.

Aquí volvemos con lo de antes, el entusiasmo. Si tu sientes el entusiasmo por lo que haces, los jóvenes lo van a captar y se les va a contagiar.

 

 

 

Informe

 

  1. Visión general del Arte

El mundo del arte es un sistema muy amplio, que abarca multitud de actividades, disciplinas y profesiones y nos afecta desde diferentes perspectivas en nuestra vida. Vivimos en un mundo extremadamente visual y cada día que pasa estamos expuestos a más y más imágenes, sean artísticas o no.

Como cualquier sistema, el del arte, se mantiene gracias a la actuación de muchos elementos implicados en mayor o menor medida, como ya hemos comentado en anteriores actividades de esta asignatura. Participan, en este complejo plan, desde los propios artistas, galeristas y coleccionistas, hasta los mineros que extraen material de la tierra para que se pueda realizar una obra o el transportista que hace que la obra llegue a su destino. Evidentemente, no todos los actores tienen el mismo nivel de implicación en este complejo mundo artístico, pero desde luego, cada una de esas actividades es necesaria.

  1. La elección del entrevistado

A la hora de enfocar la actividad que se nos planteó y qué actor elegir, uno de los factores más importantes que tuve en cuenta fue el de las controversias que trabajamos en la actividad anterior. Los artistas ¿nacen o se hacen? Es una pregunta que me llama mucho la atención, siempre he pensado mucho en ello y cuando en la anterior actividad se me presentó la posibilidad de indagar en ella casi no tuve que leer el resto de las opciones para saber que esa era en la que quería trabajar. En esta 4º PEC se nos pidió que estudiásemos un actor del mundo del arte e investigásemos su relación con alguna de estas controversias, y ¿Quién mejor para tratar este tema que un formador?, una persona que se dedica a iniciar a muchos jóvenes en las enseñanzas artísticas. Una persona que se encuentre ejerciendo esta profesión y al mismo tiempo esté en activo dentro del mundo de la creación del arte, que, por tanto, podrá arrojar mucha luz sobre el tema elegido.

Otro factor determinante a la hora de la elección del elemento a estudiar fue la accesibilidad, en este caso se trata de una persona muy cercana a mi entorno familiar, lo que facilitaba el hecho de concretar un momento que fuera adecuado para las dos personas y poder hablar abiertamente sobre los temas a tratar.

Por último, personalmente, me gustaría dedicarme en un futuro a la enseñanza de disciplinas artísticas, de manera que entrevistar a un profesional que precisamente se dedica a esta disciplina, me resultó especialmente enriquecedor.

 

  1. Quién es José Luís García Luengo

José Luis es profesor de Plástica en Educación Secundaria y Bachillerato, por tanto, en muchos casos, es de los primeros contactos que tienen los adolescentes con alguien especializado en técnicas artísticas, y que desarrolla su propia obra en el arte de la pintura, el dibujo y el grabado. Lleva en esta profesión más de veinticinco años y ha dado clase en numerosos colegios, de zonas muy diversas, desde capitales provinciales, villas minero-siderúrgicas, hasta zonas rurales muy alejadas de los núcleos urbanos.

En su caso particular, Pepe Luengo -este es su nombre artístico- entiende que su papel en todo el entramado del sistema artístico se encuentra muy alejado del mundo del mercado del arte y, por otra parte, en su ejercicio de la docencia, está muy condicionado por las distintas políticas del Ministerio de Educación de turno y los sucesivos cambios de programas con cada gobierno. De manera que la influencia del mundo artístico, es decir, de la creación artística, pasa a ser secundario en lo que se refiere a los elementos que más influyen en su trabajo.

  1. La visión del docente

Considera el entrevistado, que el mundo del arte sufre un aislamiento, o está relegado con respecto a otras disciplinas, que las políticas gubernamentales dan muy poca importancia a la educación artística, reduciendo el número de horas lectivas de la asignatura, lo que crea un efecto de bola de nieve que a su vez hace que las nuevas generaciones resten importancia a esta disciplina, dando como resultado que el arte cada vez se encuentre más apartado de la vida cotidiana.

Según José Luís, este es un peligro muy grande al que se enfrenta la sociedad actual, en la que todas las personas, pero especialmente los jóvenes, viven expuestas a una gran cantidad de material audiovisual, con una gran carga artística y el analfabetismo artístico o, ya abarcando algo mucho más amplio, el analfabetismo audiovisual, puede suponer un gran problema, tanto como individuos, como a la sociedad en sí. Las nuevas generaciones necesitan comprender las bases de este lenguaje al que tienen acceso para poder entender realmente lo que están contemplando y que no se dejen influenciar por mensajes contradictorios o subliminales que puedan contener la enorme marea de imágenes que se consumen cada día.

Desde su trabajo, José Luis, intenta dar estas herramientas a sus alumnos, tratando de acercarse lo más posible a su mundo, observando los artistas que les gustan, los creadores de contenido a los que siguen y, de esta manera, hacer que se acerquen a esta nueva era digital, de una forma crítica y responsable.

Queda claro que la enseñanza artística resulta de gran ayuda al desarrollo personal de las personas, especialmente en las edades más tempranas, y puede complementar otros campos. Sin embargo, en el mundo en el que vivimos se ve muy claramente que no se enfoca de esta manera, sino que se imparte como algo aislado, desvinculado del resto de disciplinas, olvidando que, en épocas pasadas, ciencias de gran importancia como las matemáticas o la medicina, estuvieron muy ligadas al arte y fueron desarrollándose juntas, para separarse casi por completo en la actualidad.

  1. La importancia de la implicación en la enseñanza

A diferencia de otros profesionales de este campo, José Luis no busca enseñar una Historia del Arte con sus obras insignia o con unas técnicas concretas, sino que trata de acercar el lenguaje artístico a los jóvenes de una forma más práctica, para que la puedan entender como una herramienta útil para fines muy variados, en determinados momentos de sus vidas. Entiende, que la idea de arte con mayúsculas es secundaria en este aspecto, no obstante, trata de conseguir que los adolescentes compartan su entusiasmo de la manera más justa y sincera posible, exponiendo su pasión, pero de una manera que a ellos les sea familiar.

Podemos encontrar aquí el objeto de otra controversia muy interesante ¿Cómo iniciar a los estudiantes en el mundo del arte? ¿Debemos enseñar una teoría establecida, rígida e invariable? O por el contrario ¿No podría ser mejor acercar, al menos al principio, el arte de una forma familiar, poco forzada y que de esta manera pueda generar más interés en los jóvenes estudiantes?

  1. Las distintas ópticas sobre el mundo del arte

Aún, discrepando de Pepe Luengo en cuanto a la idea de si los artistas nacen o se hacen, es muy interesante y enriquecedor ver cómo dos teorías distintas sobre una misma idea pueden converger en determinados puntos, y hasta encontrar ciertas similitudes que lo hacen especialmente interesante. Pepe defiende que los artistas se hacen, cree que el arte es un oficio que es necesario aprender y pulir con la experiencia, como muchas otras disciplinas, pero también aclara que para él el arte no es sólo lo que comúnmente es reconocido como tal, sino que también lo puede ser cualquier actividad humana que responda a la necesidad del espíritu de realizar esa actividad y tenga la capacidad de despertar alguna emoción en quien la hace.

Además, es necesario que la actividad se desarrolle a lo largo del tiempo y poco a poco vaya acercándose a esa perfección dada por la experiencia. Esto es algo poco usual y alejado de las nociones normalmente exploradas de esta controversia, pero creo que es de gran interés, porque le da una vuelta a la forma de tratar estos temas y aporta frescura.

¿No debería ser el arte una llamada del individuo a algo mayor que él? ¿Una forma de expresión, o de canalización de las sensaciones o sentimientos, una emoción encarnada en una actividad hecha con pasión? Ahí reside exactamente el verdadero arte, en el entusiasmo de quien lo hace y no en qué se hace. El problema de esta concepción del arte es su subjetividad, además, muchas personas quizás no alcanzarían a entenderla. Por otra parte, el camino que nos abre esta descripción podría llevarnos a dudar si alguna de las obras que consideramos “arte con mayúscula” quizás no tendría por qué serlo.

Desde mi percepción, José Luis, al estar desvinculado del mercado del arte puede permitirse opinar de una forma libre y consecuente, porque no depende de las ataduras ni dictámenes del mercado, casi siempre muy jerarquizado y al servicio del poder de turno. El hecho de no depender de este mercado le da la capacidad de explorar nuevas formas de expresión artística y aceptarlas como tal, acercárselas a sus alumnos, como potenciales artistas, ofreciendo una visión independiente.

 

De todos los temas tratados durante la entrevista, creo que ninguno se libra de crear controversia. La más llamativa es claramente la de si el artista nace o se hace, pero también puede ser muy interesante hablar sobre la importancia que tienen determinadas personas o acontecimientos en nuestras vidas, que nos pueden marcar y hacer seguir unos caminos u otros. Muchas personas pueden otorgarle una importancia mínima a este planteamiento, y creer que las inquietudes las lleva uno mismo, siendo parte de su propia naturaleza, pero esto le resta mucha importancia a la capacidad de las personas de observar e interpretar todo aquello que nos rodea.

Vivimos en un mundo que se mueve de forma vertiginosa, recibimos un flujo constante de información y sensaciones y unas nos llaman más la atención que otras. Algunas, pueden incluso marcarnos de por vida. José Luis nos habla de la importancia de tener esto en cuenta, pero también de cómo tenemos que entenderlo como algo natural a lo que hay que tratar con modestia y honradez.

  1. Conclusiones personales

En definitiva, una vez realizada esta entrevista he llegado a varias conclusiones. La primera de todas es que es muy interesante razonar y pensar alrededor de un tema de forma individual, pero es también muy importante compartir las ideas que tenemos al respecto con otras personas, para así poder fijar y ampliar conceptos y cuestionar otros que podríamos dar por supuestos.

Es muy interesante analizar las distintas formas de ver un acontecimiento por parte de dos personas, a veces, incluso compartiendo la misma opinión al respecto, uno puede ver algunas cosas con más claridad o les darles más importancia a unas partes que a otras. Otra conclusión a la que me hizo llegar es que el arte resulta ser un elemento de nuestro día a día que puede ser entendido como algo concreto y aislado o como una disciplina que se relaciona y se nutre de otras, enriqueciéndose a sí misma y a las demás. Esta segunda forma de entenderlo, creo que es mucho más rica e interesante, aunque, tristemente, la primera está mucho más generalizada en nuestra sociedad, formando parte de las instituciones educativas.

En cuanto a cómo afrontar el tema de la enseñanza, como alumno que soy, creo que el planteamiento de la estructura didáctica cojea bastante en algunos aspectos. El primero, como ya queda dicho, es el aislamiento de cada disciplina, sobre todo en momentos tempranos de la formación, pues se limita mucho el aprendizaje de cada campo al negar la participación de otras disciplinas. Se tiende a asociar unos conocimientos con ciertas asignaturas de forma muy tajante y casi se niega la participación de otras.

Otros dos problemas que he detectado de forma muy patente en el sistema educativo tienen que ver, por un lado, con la normativa institucional y por otro, con el factor personal de los docentes. La primera es la rigidez en la forma de enseñar, no se imparte un temario en función de las necesidades o intereses del alumnado, sino que se diseña desde los altos organismos un modelo curricular que no tiene por qué ser el más adecuado a todo el alumnado, pensando, en este caso, en la gran diversidad geográfica del territorio y las distintas necesidades de cada zona. Además, se pierde muchísimo tiempo y energía en papeleo inútil, burocracia pura y dura, que no aporta nada positivo a la calidad educativa.

Por otra parte, cada profesor es un mundo, y muchos de ellos siguen impartiendo la enseñanza como una mera exposición de los materiales didácticos con la única expectativa de que los alumnos simplemente lo repitan de forma exacta, sin ningún tipo de análisis o interpretación.

En este caso, nuestro ejemplo de profesor lucha activamente contra este último aspecto, buscando nuevas formas de enseñanza.

Por último, la falta de entusiasmo. Como he dicho antes, estos factores son muy personales y dependen del profesor, pero, como alumno, he pasado por muchos formadores, de muchas materias, y tengo que decir que son pocos los que muestran verdadera pasión por su trabajo o por la disciplina que enseñan, siendo muchos los que tienen una actitud de cansancio o frustración, que se limitan a recitar un sermón y si el alumno no lo capta y no lo repite de forma idéntica, tiene una valoración negativa, cortando así, de raíz, la posibilidad de generar entusiasmo en sus alumnos. Soy consciente de que no es fácil la función del docente, sobre todo cuando está sujeto a una normativa rígida y bastante absurda, sin embargo, creo que en muchos casos debería haber más vocación y entusiasmo para fomentar así el interés de los estudiantes.

 

 

Diario de bitácora.

En los primeros momentos de estudio de la temática de la actividad, no sabía muy bien qué esperar en cuanto a las respuestas del entrevistado. Al principio pensaba que contestaría cosas muy similares a mi opinión, pero al ir pensando más en ello e ir formalizando las preguntas, me di cuenta de que no tenía por qué ser así. Llegados a este punto me empezó a picar la curiosidad por qué pensaría José Luis sobre cada uno de los temas, cómo los abordaría, llegando en algún momento a preocuparme por que los pudiera ver pretenciosos o fuese por un camino que no fuera el fin de la entrevista, terminando por hablar de otros temas. Todo ello se vio aclarado y resuelto en los primeros minutos de entrevista, aunque no respondió de la forma en la que creí que lo haría, lo hizo de una manera bastante clara y al son de la entrevista y la actividad.

Creo que en cada una de sus respuestas quedan patentes los muchos años de experiencia y lucha por mantenerse fiel a su postura. Esto mismo apoya y refuerza lo que menciona de la importancia de la sinceridad a la hora de hablar de cualquier tema, para ser justo con quien recibe la información.

Algo que creo que es de vital importancia, es entender el hecho de que al tratarse de una persona que dedica mucho tiempo a pensar en la naturaleza de lo artístico, aunque no se encuentre condicionado por muchos de los mecanismos internos de lo más profundo del sistema del mercado del arte, nos puede dar una información muy valiosa. Encontramos a una persona muy cercana a este mundo que lo aborda desde un punto de vista más imparcial, hablando de ello con el entusiasmo y experiencia de quien practica la creación artística pero sin los intereses o egos de quien depende de ese mercado para su propia subsistencia, pudiendo darnos una información más pura y menos adaptada a posibles mensajes en pro o en contra de determinadas posturas concernientes a lo artístico.

Por último, querría resaltar algo que me ha gustado especialmente. A lo largo de toda la entrevista he notado, y creo que lo podrá apreciar el lector, una intención por normalizar el arte, alejándolo de lo elitista, convirtiéndolo en algo que forma parte de todos y que incumbe a todas las personas. Nos habla del arte de una manera bastante intangible, con el entusiasmo, el sentimiento y los anhelos del hombre, pero no de una forma elitista ni excluyente.  Es una visión que desde mi punto de vista debería promulgarse mucho más.

Debate0en Informe, formador de personas

Deja un comentario